Un desolado corazón

Tango - S/F

Letra: Roberto Miró
Música: Miguel Nijensohn

La dejé que se marchara, sin pensar
que su ausencia me traería este dolor,
ilusiones, esperanzas
todo ha muerto por mi culpa y desamor.

Y sus lágrimas de amor que no entendí,
y las súplicas que nunca profirió,
hoy me cuentan su martirio
hoy que todo para mí, murió.

Qué lejos de mi beso
dormirá tu frente.
Qué carga tan inmensa
sobre mi conciencia.

Y te llamo, nuevamente
y te busco, entre la gente,
que me mira, indiferente
qué le importa mi sufrir.

Señor, yo te lo ruego,
dile que no puedo
sin su amor, vivir...

Yo no supe que era enorme mi querer
hasta el día que llorando se marchó,
ilusiones, esperanzas
para siempre, detrás de sus pasos se llevó.

Y esas lágrimas de amor que no entendí,
y las súplicas que nunca profirió,
hoy me gritan lo perdido
porque todo para mí, murió.