Música: Virgilio San Clemente / Antonio Cerazo
Pobre página triste del ayer,
Dulce idilio de un pueblo lejano
Que nació en un bello atardecer.
Aún evoco el camino empolvado
Que orillaba una humilde mansión,
Y aún recuerdo el rosal que crecía
Entre brisas, arrullos, perfumes y sol.
Qué tarde más serena
Qué alegre primavera,
En flores la pradera
Mi paso engalanó.
En tus ojos leía
Ensueños de ventura,
Y mil besos de ternura
En tus labios bebí yo.
Pero vino el invierno y con él
Sombra y frío a la casa llevó,
Se moría la risa en tus labios
El viejo rosal del jardín se secó.
Y una noche te fuiste de mí
Con la muerte que cruel te llevó,
Y a tu lado en tu marcha lloraba
Por toda la dicha que el tiempo truncó.
Primavera de amor y de vida
Entre aromas de besos y sol,
En la blanca casita lejana
Embriagados vivíamos los dos.
Murmuraba el arroyo cercano
El rosal se bañaba en carmín,
Y en los labios jugaban los besos
En las tibias tardes del viejo jardín.